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viernes, diciembre 15, 2017

:: El parque Ecoturístico Tziscao ::

Lagos de Montebello (01)

Domingo, 15 de Octubre de 2017. La noche anterior había quedado envuelta en canciones y en amenas pláticas; para cuando despertamos era aún buena hora para dejar el hostal y proseguir al siguiente destino: Comitán. Y desde Comitán tomar el transporte que nos llevara a los Lagos de Montebello, ubicado como a una hora y media de distancia (61 Km) más o menos.

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Lo primero que hicimos luego de beber café con pan y despedirnos de Roberto, fue dirigirnos hacia las  combis para abordar la que tiene como destino final a la Villa Tziscao, nombre del Lago y al parecer también del lugar; poco a poco al acercarnos a través de la carretera se podía observar el cambio de vegetación a lo largo de los municipios que se atravesaban: No es que hubiera mucha diferencia, pero de pronto los grandes pinos aparecían como manchas en el paisaje, hasta llegar al punto en que nos bajamos: En la entrada del Lago Montebello, que es parte del Parque Ecoturístico Tziscao.

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Resulta que este parque en particular no es precisamente el que aparece en todos los tours o el que los turistas conozcan en las primeras referencias que se les da cuando andan por estos lares. Si bien está el Parque Nacional de Los Lagos de Montebello (el oficial ,digamos) también está éste, el Ejidal, llamado Parque Ecoturístico Tziscao. El parque ejidal cubre también a los lagos que el nacional no, y eso es lo que le hace ser punto y aparte. La cuota para pagar la entrada y poder recorrer todos los lagos de este parque está en 25 pesos. El guardia de la entrada nos aconsejó rentar un moto taxi, pues así sería más rápido visitar todos los lagos de dicho parque, a lo cual accedimos y pudimos conocer a Josué, nuestro guía y conductor.

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Naturalmente antes ya habíamos entrado a conocer a este primer lago, el Lago Montebello (Sí , así se llama). Por lo que mientras platicábamos con el guardia esperábamos a Josué para que nos guiara por los siguientes lagos. Una vez llegado nos movilizamos hacia el siguiente lago, que en realidad a tiempo de moto taxi está corto en distancia, lo cual es muy favorable ya que se puede aprovechar muy bien la luz del día; además de que no muchas personas se concentran al mismo tiempo en los lagos que forman parte del parque ejidal, pues generalmente están en el nacional allá donde se pueden ver los lagos "Esmeralda", "La Encantada" y "Ensueño".

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Y sabiendo que habría poca gente en los demás lagos, la calma predominó, pues eso permitiría que las tomas salieran bastante limpias, y eso es algo que se agradece siempre. El segundo lago a visitar dentro de este tour fue "Cinco lagos", un lago enorme conformado por cinco que se conectan de alguna manera. Este no lo conocía, creo que ni por fotografías, y es uno de los más bellos y de los que dispone de un mirador con una vista bastante amplia de su extensión. Son hermosos lagos, hipnotizantes en verdad.

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Ve el cielo y la tierra al mismo tiempo, pero el cielo está abajo ahora; es un cielo líquido, con nubes como sombras y sombras como nubes cubiertos por cabellos duros de color verde que se movilizan al viento, pero no ceden tampoco; la extensión de este firmamento encerrado en brazos de tierra parece limitado, pero hacia abajo desconozco qué tan profundo pudiera ser, quizá los tonos de azul y aguamarina determinen la profundidad de la zona; o simplemente sea una vanidad de la misma agua para quedarnos perdidos y absortos en sus ojos, y atraparnos en su canto invisible cual Ulises frente a las Sirenas.

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Gárgolas por doquier en cada lago, pero disfrazados de árboles y peñascos, custodiaban los tesoros naturales del lugar; hay tantos lagos que los nombres podrían confundirse u olvidarse; como este caso, en que no recuerdo si el siguiente lago, cuya majestuosidad puede verse desde la orilla de la carretera y en picado, se llama "El Caracol" o "El perol"; pero supongo que alguno de esos debe ser ya que sólo están esas dos opciones en esta parte de la aventura; así que con un promedio de 50/50 me atreveré a suponer que el siguiente lago visitado fue "El Perol".

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Si acaso a apenas un par de minutos, está la otra parada a orilla de carretera, pero aquí sí se requiere adentrarse un poco en la maleza para descubrir un claro desde donde se distingue ese ojo de agua sutil y tranquilo, verde y azul, azul y verde. Quizá se trate de "El Caracol", nombre también propio de uno de los tantos lagos que hay por aquí; de esos lagos que quizá pertenezcan a la categoría de poco accesibles o bien, de aquellos que exigen tiempo para poder llegar hasta sus aguas mediante veredas y caminos en medio del bosque. ¿Vale la pena caminar horas para llegar a tocar esas aguas? Ya lo creo que sí.

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Zafiros líquidos que reflejan el infinito, que dentro de sí pueden guardar nubes, aves, y estrellas; así es el cuerpo de estos lagos, variando quizá entre cada uno el tono de azul y la transparencia con la que existen. El claro ejemplo de ello es el siguiente lago, "El Pojoj", que sí pertenece también a la lista de lagos que se visitan en el tour del Parque Nacional, por lo que cuenta con la infraestructura necesaria para realizar paseos en balsas, tener servicio de alimentación, baño y vendimias; quizá sea el lago en donde más tiempo invierten los turistas, pues realizar el paseo en lancha para ir a visitar la isla de las orquídeas es algo que muchas personas desean hacer estando ahí; además, cómo poder decirle que no a la experiencia de estar encima de esa agua tan azul y transparente; al menos, yo no podría negarme...

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Momentos después de estar ahí y admirar la enorme popularidad de "El Pojoj", seguimos al siguiente lago, el Lago Tziscao; que también pertenece a los lagos que se visitan en el tour del Parque Nacional, ya que se encuentra su mirador a plena orilla de carretera federal y eso lo hace muy accesible. Este lago es emblemático, pues es de los más grandes si no el más de todos los lagos existentes, además de que posee la particularidad de albergar a una población a sus orillas, allá de aquel lado, donde el paisaje incluye también ya parte del nuestro hermano país de Guatemala.

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Rara vez se tiene la oportunidad en un tour de visitar la Villa de Tziscao, en esta ocasión contamos con la disponibilidad de Josué para llevarnos hasta el otro extremo del Lago, donde se llega atravesando el propio pueblo; que ya haciendo cuentas no está tan lejos en realidad, sólo es cosa de minutos. Y eso algo inesperado, la vista cambia totalmente desde el extremo opuesto del lago, es como si en serio estuvieras en otro lugar; pero vaya que otro, quizá dentro de un área geográfica muy apartada, ya que luce diferente con lo antes visto.

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Me parece que la urbanización le da un toque más cotidiano, como que más "normalizado" dentro de los atractivos a ver en este lugar, pues aquí hay hospedaje, tiendas, habitaciones, renta de cabañas, renta de espacios para casas de campaña, tours locales, y el transporte público va desde Tziscao hasta Comitán; lo que lo hace un destino en serio muy accesible, y por si fuera poco, el Lago Tziscao no es el único lago atractivo ubicado aquí...

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Gustas contemplar de pie, o salir lago adentro en balsas, puedes hacerlo; o simplemente admirar desde la orilla y luchar contra el poco tiempo que aún queda y aprovecharlo para visitar a tus espaldas (si estás viendo de frente al Lago Tziscao) el Lago internacional. Hubo un tiempo en que pensé que el Lago internacional era el Tziscao, ya que desde el mirador de la carretera señalan hacia este extremo anunciando que aquí se encuentra el Lago internacional, y uno se va con la finta. Pero no, es otro lago aparte y se llama internacional ni más ni menos porque sobre sí pasa la línea divisoria entre México y Guatemala. Es un espectáculo geográfico admirar esta situación, algo similar a apreciar "La línea divisoria" en el volcán Tacaná. Aunque claro, a miles de metro menos de altura.

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Mucho cambia el voltear la vista, en serio, es como si de repente te trasladara a otro país (y en cierta forma, así es). De ver un lago enorme a sus anchas con lanchas, casas y paisajes a lo lejos; ahora ves un lago más pequeño, más encerrado, más íntimo y personal, el tipo de lago en el que te sientas a contemplar el ocaso o simplemente lo que sea que tengas frente a los ojos...

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En serio que recomiendo llevar a cabo este tour local, visitar todos esos lagos en el mismo día es algo increíble, y eso que hay más lagos todavía pero que están más alejados y por obvias razones no se visitaron, pero eso no excluye la posibilidad de hablar con un guía local (como Josué) y pedirle poder conocer los demás Lagos, porque si algo tienen en común las personas de este lugar, es que se conocen todos los lagos que rodean a este hermoso paraje como la palma de su mano con cada uno de los cinco dedos...

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Con gusto, te comparto la galería:

martes, noviembre 21, 2017

:: En Zinacantán::

Zinacantán, Chis. (01)

Sábado, 14 de Octubre de 2017. El siguiente pueblo indígena es Zinacantán, apenas a unos cuantos minutos de la entrada de San Juan Chamula (tomamos ahí el transporte ya que no hay encontramos uno que fuera de San Juan Chamula a Zinacantán de manera directa). Había estado ahí aquí antes ya, pero ahora se le veía una cara un tanto diferente; si bien había cambiado de manera positiva en unos cuantos años, los recientes sismos habían afectado los suficiente como para notarse las consecuencias, sobre todo a las construcciones emblemáticas y por ende antiguas de este mágico pueblo.

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Aun así, conserva su encanto tranquilo y fresco, con ventiscas esporádicas leves que te invitan a permanecer así, rodeado de valles verdes y de relieves que guardan celosamente al pueblo. En los alrededores puede ver el rostro más natural de Zinacantán, el rostro de la tierra y el agua, de los árboles y los rebaños, de los frutos y las flores.

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Los paisajes son tan variados que debes tomar el tiempo para ver a cada uno de ellos, y si puedes, eternizarlos. Estuvimos bastante tiempo observando un rebaño de borregos y con la niebla y el suelo verde, parecíamos estar en otro lugar por un momento, y luego regresar de pronto. Luego de eso, después de haber platicado con un señor sobre los viveros y cultivos de rosas, nos dirigimos a conocerlos.

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Pese a que es propiedad privada, los invernaderos se encuentran accesibles y sin restricciones; aunque no por eso entramos a uno de ellos sin haber pedido permiso antes. Luego de solicitar el paso y luego de habernos permitido hacerlo, las voces de los trabajadores a quienes no conocimos siguieron sus labores en los otros invernaderos mientras observábamos el interior de uno de ello y tomamos fotografías de las rosas en desarrollo.

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Había miles de rosas seguramente, de varios colores y en diferentes estados de desarrollo, algunas eran aún botones y otras ya estaban abiertas; inclusive había invernaderos donde sólo se sembró rosas roja, quizás por ser la de mayor demanda. sin darme cuenta de repente Reynaldo estaba detrás de mí, es el encargado de los invernaderos y me explicó la manera en cómo se realizan los injertos, la cosecha, el cuidado, la exportación y la conservación de estas flores, además de otras variedades de flores que también crecen aquí y se envían a otras partes del país.

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Luego, se marchó y estuvimos unos minutos más en medio de todas esas flores, realmente estar en medio de surcos de rosas es algo conmovedor, y en una de esas hasta se pregunta uno "¿A dónde irá a parar esta?". Al salir a esperar al mototaxi que nos levaría de regreso al pueblo, nos topamos con un peral; cortamos un par de frutos y los comimos. Pese a su apariencia tosca y su color apagado, esas peras estaban realmente deliciosas.

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Una vez llegados al pueblo, en la estación de transporte público hacia San Cristóbal, esperamos para el regreso; llegamos a buena hora todavía a San Cristóbal a comer y a pasear un poco más, total, quedaba todavía un día y medio por recorrer...

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Con gusto, te comparto la galería:
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