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viernes, diciembre 19, 2014

:: Gemínidas ::



Reciben su nombre de que el punto del cielo del que parecen venir está en la constelación de Géminis, que en las latitudes norte se puede ver a partir del anochecer, mientras que en el hemisferio sur aparece alrededor de la medianoche. Aunque el pico de actividad máxima estaba previsto para la noche del 13 al 14 de diciembre alrededor de las 03:00 a.m., el rango de fechas para ver las Gemínidas fue del 07 al 17 de diciembre de este año (fuente: Aquí).


En realidad provienen de los restos del asteroide (3200) Faetón. Son meteoros de velocidad moderada que radian de la constelación de Géminis, y es la lluvia de mayor actividad del año junto las “Cuadrántidas” (Fuente: Aquí).



La contaminación lumínica no ayudó mucho ni mi ubicación casera, pero con un poco de paciencia pude hacer pocas fotografías apenas decentes, habrá que estar al pendiente de este tipo de eventos para procurar capturar mejores imágenes el año próximo (Se puede ver la lista de eventos para el 2015 Aquí) y ver si puedo lograr hacer alguna foto increíble como la que hizo Alvin Wu o como las que lograron algunos más.

martes, diciembre 16, 2014

:: Viacrucis Chazumba, 2014 ::

Viacrucis Chazumba 2014 (01)

Y he aquí un “foto resumen” de lo que fue el viacrucis en Semana Santa del 2014, que si bien es una tradición que se repite año con año y de manera general no cambia, sí que vale hacer el recorrido para recordarlo…

Viacrucis Chazumba 2014 (04)

Viacrucis Chazumba 2014 (07)

Viacrucis Chazumba 2014 (18)

Viacrucis Chazumba 2014 (28)

Viacrucis Chazumba 2014 (36)

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miércoles, diciembre 10, 2014

:: La última cena ::

La última cena (01)

Jueves, 17 de Abril de 2014. 20 minutos antes de las dos de la tarde ya estaba parado frente a la iglesia, los rumores y los comentarios ajenos a los que puse extrema atención indicaban que aquí sería el evento: La representación de la última cena, un recordatorio de lo que pudo haber sido los últimos momentos de Jesucristo con sus discípulos aquella noche en el huerto de los olivos (Getsemaní) a donde tenía la costumbre de orar.

La última cena (02)

La última cena (03)

La última cena (05)

Los últimos detalles se estaban retocando al fin, la mesa estaba ya puesta; a cada minuto la gente se acercaba más y más y pronto la concurrencia era notable. Cuando todo estuvo listo, dieron marcha a la escenificación: Los apóstoles y Jesús aparecieron de repente desde el interior de la iglesia para desarrollar esta tradición.

La última cena (06)

La última cena (08)

La última cena (10)

Cargando al Santo Cristo, llegaron justo a una parte del atrio de la iglesia en donde todo se había levantado, se detuvieron justo en el lugar donde la mesa se había colocado y, acomodando al Cristo de frente y atestiguando la representación, cada uno tomó su respectivo asiento.

La última cena (11)

La última cena (12)

La última cena (13)

La ceremonia continuó con las palabras de Jesús a sus apóstoles mientras, en primer lugar, levantaba el incienso para purificar y santificar la sagrada cena y su concurrencia; tomó cada alimento (cordero, pan y verduras) y los levantó al tiempo en que con cada uno de ellos pronunciaba frases de pasajes que rememoran lo sucedido aquella noche...

La última cena (14)

La última cena (16)

La última cena (17)

El padre intervino y bendijo los alimentos, ocupó su lugar en la mesa, y todos tomaron alimentos. La escena de los apóstoles simultáneamente se daba con la escena de nosotros, los espectadores; pues al tiempo en que ellos comían, la concurrencia empezó a repartir también los alimentos que cada cual dispuso a llevar para acompañar y comer. Algunos repartían frutas, otros más jugo, algunos barbacoa de borrego, tamales, antojitos, etcétera.

La última cena (18)

La última cena (20)

La última cena (21)

Yo, desconocido de este aspecto en particular (ya que es la primera vez que me toca estar en la última cena), no llevé alimento alguno; pero eso no fue motivo para que me excluyeran, pues, concentrado en la cámara, apenas me di cuenta del momento en que se acercaron a mí, cuando sólo vi un par de manos que sonrientemente me ofrecían un vaso de jugo, un trozo de pan, verduras, y barbacoa. Y dejé un momento la cámara, para integrarme a la degustación y acompañamiento de la tradicional última cena…

La última cena (22)

La última cena (23)

La última cena (24)

Cuando terminamos de compartir el alimento y los apóstoles agradecieron los suyos, prosiguieron con el lavado de los pies, tanto por parte del padre a Jesús, como de éste hacia sus discípulos y también de parte de los presentes a él; el lavado de pies se llevó con calma y solemnidad, hasta que tocó seguir con la representación en el momento en que Jesús se dirigía hacia sus discípulos y les compartía por última vez el pan y el vino, del que sabemos nace la referencia literaria aquella de “Esta es mi sangre…” 

La última cena (26)

La última cena (27)

La última cena (29)

Fue en ese momento en que Judas y sus intenciones fueron reveladas, y éste, al no soportar seguir presente ante sus cofrades, se marchó corriendo…

La última cena (32)

La última cena (34)

La última cena (35)

Para dar finalización a la representación de esta escena de Semana Santa, los apóstoles y Jesús regresan a la iglesia; los presentes llevan al interior de la iglesia la figura de Jesús, y con ello se concluye las labores de representaciones del día, para proseguir al día siguiente, como marca la historia, con el juicio y la crucifixión…

La última cena (37)

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jueves, diciembre 04, 2014

:: En la olla de agua ::

Olla de agua (01)

Miércoles, 16 de abril de 2014. La tarde se mantenía naranja y el viento soplaba moderadamente, las nubes mantenían mucho más tiempo su posición aérea porque al parecer no era tan intenso el movimiento allá arriba, no para notarse en un abrir y cerrar de ojos desde abajo, donde practicaba caminata por la parte trasera de la iglesia del pueblo.

Olla de agua (02)

Olla de agua (03)

Olla de agua (04)

Me topé con mi tío y en cuestión de segundos estaba ya trepado en la motocicleta, me platicó de una olla de agua en las afueras del pueblo, y luego de escucharle y asentir con una gran interrogante en mi mente –pues no me imaginaba exactamente a qué se refería- salíamos por carretera a buscar ese rumbo en medio de una incertidumbre que si bien no garantizaba mínimamente encontrar el lugar, aseguraba un paseo espectacular bajo el atardecer de Semana Santa.

Olla de agua (05)

Olla de agua (06)

“¿Por aquí o por allá es la entrada?” Decía para sí mi tío, y yo solo enmudecía y de vez en cuando le externaba uno que otro “Saaaabeeeer…” porque en realidad, ni idea tenía de a dónde o cómo llegaríamos a tal lugar. Tomamos un desvío al interior de una barranca y caminamos hacia adentro, buscando un desvío que nos condujera hasta la “Olla de agua”; mientras tanto, la tarde iba alejándose. Llegamos a un punto en el que no se podía avanzar más, subimos unas laderas y de repente nos encontramos en medio de un lugar aparentemente abandonado, con vegetación por doquier: Un camino estrecho se mostraba a algunas decenas de metros adelante, pero aquí de inmediato a tres o cuatro metros a la redonda, no había indicios de cómo poder entrar a tal camino porque nos rodeábamos de pastos, cactus, árboles de mezquite, y muchas piedras.

Olla de agua (09)

Olla de agua (10)

Era como estar en medio de la nada, si es que eso existe. El único sonido que percibí fue el de mi respiración cansada, no más. La vista era espectacular: Los árboles, la tierra, los cerros y las nubes me brindaron lo que considero unas de las mejores escenas para fotografiar; ojalá les haya rendido el tributo merecido con la cámara.

Olla de agua (11)

Olla de agua (12)

Como vimos que no había ya más cómo avanzar hacia adelante, regresamos sobre nuestros pasos, volvimos a caminar dentro del barranco en medio de un río seco que sólo mantenía (además de mucha arena) líneas de erosión en las piedras y suelos que lo componen, quizá como un último recurso para mostrar que hace mucho tiempo el agua llegó a alcanzar un nivel provechoso para la zona.

Olla de agua (14)

Olla de agua (15)

Son escenas muy comunes en estos lugares, las que parecen de un tiempo prehistórico. Lo he dicho y creo que siempre lo repetiré, porque así mismo se repiten estas imágenes; son parte icónica de lo que uno puede encontrar en medio de Oaxaca y Puebla.

Olla de agua (17)

Olla de agua (19)

La tarde caía con más prisa. El sol se despedía poéticamente desbaratando el cielo de nubes en fragmentos de colores intensos y cálidos y aquí abajo la vegetación cooperaba con siluetas definidas mágicamente. Espectacular, tanto que si en ese momento hubiera sabido que no lograríamos el cometido de llegar a la “Olla de agua” no me hubiera importado tanto, porque el estar en el momento justo presenciando un atardecer de esa belleza bien podría ser el único motivo por el cual habríamos salido para aguardar la tarde y haber caminado en medio del barranco; es invaluable, y tan breve que debe disfrutarse con la menor cantidad de parpadeos posible.

Olla de agua (20)

Olla de agua (21)

Un caminante nos aclaró la ruta para la “Olla de agua”, así que ya con menos luz que antes, retomamos el camino sólo para ver si podíamos llegar, aunque fuese en medio de una penumbra con apenas destellos luminosos en el horizonte. Luego de unos minutos de camino por carretera, volvimos a adentrarnos en los caminos de tierra y arcilla, y caminamos hacia abajo y luego hacia arriba una parte antes de llegar a la Olla de agua (que está en la cima de un cerro); y luego de andar por un camino un poco accidentado, pudimos con las últimas luces del día (aún suficientes para distinguirse bajo una mancha de arrebol, los lejanos cerros de quién sabe dónde) ponernos frente a dicha Olla de agua y ver de qué se trata.

Olla de agua (24)

Olla de agua (26)

Es un proyecto que busca recaudar agua directamente de la lluvia (ya decía yo el porqué de estar prácticamente en la cima de un cerro), que permitirá a unos 50 habitantes directos captarla y destinarla para su posterior uso humano y riego de la tierra. Yo no sabía que se llamaba “Olla de agua” a estas albercotas, pero fue bueno aprenderlo. Afortunadamente nos tocó verla casi llena, y eso demuestra lo útil que son este tipo de implementaciones, sobre todo en lugares como estos cuya característica principal es ser semiáridos y contar con poca precipitación pluvial.

Olla de agua (27)

Olla de agua (29)

Una vez conocida la Olla de agua, y habiendo caído la noche, regresamos a casa, mientras, pensaba yo: “Esto será genial contarlo…” Y no me equivoqué.

Olla de agua (30)

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