Domingo, 20 de marzo de 2016. Había
llegado la noche anterior a Chazumba, así que no tenía mucho conocimiento sobre
cómo estaría el itinerario de la iglesia para la bendición de las palmas; al
parecer irían primero a la cumbre del cerrito colorado a las 11:00 de la mañana
a bendecirlas y de ahí bajarían a la iglesia a proseguir con la misa.
Tomando esto
como referencia, salí de la casa rumbo a la cumbre pero al llegar no vi gente
ni rastros de una procesión (restos de palma, huellas de pisadas…), era como si
nadie hubiese ido ahí o bien, ya hubiesen bajado; tuve mis dudas, pensé que
para ser las 11:30 la hora en que llegué, aún debería haber gente, pero no fue
así.
Pasé a la iglesia a ver si estaban ahí, y ahí estaban. La gente estaba ya lista para entrar a la iglesia de manera lenta y haciendo referencia a la pascua, agitando lentamente las palmas y dando espacio a que entraran los apóstoles; una vez que todos habían entrado para iniciar la misa, regresé a casa a avisar del evento y nuevamente nos dirigimos a la iglesia para presenciar la ceremonia, y ahí estuvimos, presentes en el inicio de la semana santa en Chazumba mientras que a lo largo de esta había ya expectación sobre los siguientes acontecimientos.
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